Bueno, voy a hacer una pequeña crónica de lo que han sido dos días de curso de conducción segura de motocicletas, de la mano de Miguel Durán. El curso constaba de una primera fase teórica, que Miguel envía días antes por mail y por wasap, una vez llegado el día, un briefing previo y ya las prácticas, cuatro horas durante la mañana del sábado y cuatro el domingo. Durante las rutas, va grabando con una cámara, primero la manera de conducir de cada uno y luego al final del curso, otra grabación para ver la evolución.
El curso trata de: postura correcta en la moto, mirada, valoración de la curva, técnica del contramanillar, del giro apoyado y giro apoyado con rodilla, búsqueda del ápice de la curva, trazada y salida. No es un curso para correr más, sino un curso para tener más margen de seguridad ante cualquier imprevisto, es decir, para ir más sobrados. Como dice Miguel "para tener más armas, antes teníais una pistolita y yo voy a hacer que tengáis un pistolón".
Somos cuatro alumnos (no se admite más) cada uno con sus carencias y vicios adquiridos, difíciles de quitar si no contamos con ayuda de un profesional. Los cuatro teníamos un defecto en común: que nos anticipamos a la curva. Hay que saber aguantar la curva para cuando veamos el ápice tirar la moto y no anticiparnos.
Yo no voy a hablar de mis compañeros de curso, los cuales salieron bastante contentos con lo aprendido, voy a hablar de mí. Yo soy un paquete, soy un tentetieso, que no va más allá de practicar una postura inglesa en la moto, voy con los brazos demasiados tensos y los pies demasiado adelantados en las estriberas.

Miguel te dice cómo corregir esos fallos posturales. Te dice como debes ir en recta ya pensando en siguiente curva, antes de llegar a la misma, saber valorarla, tomar puntos de referencia y valorar las señales de tráfico para saber qué tipo de curva tenemos ante nosotros.
Cuando uno hace un curso, debe ir "en modo esponja", y yo reconozco que no lo fui. El sábado iba bastante desconcentrado, el domingo mejor, y eso se notó. No di una a derechas, no fui buen alumno.

Os puedo decir que durante todo el fin de semana no me he quitado el curso de la cabeza e incluso hasta estos momentos me he planteado cosas, y es que creo que no supe aprovechar bien el curso, he sido un alumno difícil para Miguel. Pero no hay que olvidar que en un curso de horas limitadas no podemos aprenderlo todo y se trata luego de practicar, de practicar mucho, de poner en práctica lo que hemos aprendido. Miguel nos recomienda hacer entre 500 y 1000 kms en moto yendo solos para notar los resultados. A juzgar por los videos que nos ha enviado (el domingo no dio tiempo a visualizarlos), esa mejoría ya era notoria al finalizar el curso. Yo estoy decepcionado conmigo mismo por no haber sido más "esponja", pero me consta que he aprendido muchas cosas y espero ponerlas en práctica.
Os voy a hablar algo del profe, Miguel Durán. Es un tipo con mucha energía, desborda energía y vitalidad, hace lo posible para que interiorices sus enseñanzas, se desgallita debajo del casco para darte instrucciones y ayudarte, y sobretodo es un apasionado de las motos como nadie. Si tiene que darte la bronca, lo hace sin problemas. Es un profesional.
No lo he comentado antes, pero parte del curso también constaba de probar nuestras motos para valorar su funcionamiento y probar las suspensiones. Respecto de mi Tracer me dio un par de consejos para ajustar suspensiones y a juzgar por todo lo que la probó, yo creo que le gustó...y mucho.
En fin, que ha sido un fin de semana intenso, con muchas sensaciones, unas mejores y otras peores. Si me preguntan si yo recomiendo hacer el curso? claro que lo recomiendo, éste y cualquier otro, siempre que lo imparta un profesional preparado, no un aficionado, que también los hay...si yo he aprendido más o he aprendido menos....el tiempo lo dirá. De momento...a practicar!!
